…de creer en los Reyes Magos, a ser Baltasar!!!

Ya estamos en esos días donde la gente, entre los que me incluyo, deambulamos por comercios, galerías y tiendas de todo nivel y estilo, con cara desencajada y con un pensamiento único, otro año mas que se pasan las fechas.

La sistemática viene a ser siempre la misma, una legión de mujeres, con las ideas claras y con el tiempo justo a la búsqueda de todo aquello que sus cabezas han ideado y que seguramente antes de la hora de la comida, o por la noche a mas tardar, en función de la cantidad de personas que formen su núcleo familiar tengan mas que resuelto, a falta del roscón o si me apuras ni eso. Y de otro lado nosotros, seres dudosamente pensantes, que llegadas estas fechas y con una precisión germánica nos encontramos ante la misma pregunta un año mas, ¿que coño le regalo yo?.

Partimos de la base que al menos no tener hijos ayuda, porque aunque tu pareja si los tenga, de los regalos buenos, se encarga su padre, pero aun así te encuentras en ese momento iniciático en el que descubres que a pesar de todo hay que ver la cantidad de gente que puebla tu vida jooooder!!!!

Pasado el estupor del primer momento, decides en un alarde de grandeza salir muy temprano, para no encontrarte ademas, en el atasco que se prevé en los lugares donde se escondes las reliquias a las que vas a dar caza. Esto que a priori crees que es una de esas ideas que definen como uno de los grandes genios dinamo de nuestra generación, acaba por disolverse a medida que pasan las horas, por la tenaz batalla por abandonar el lugar de los hechos, pues a la hora que pretendes irte, una horda masiva de peña con la misma problemática que la tuya, pero mas tardíos, pretenden recoger las migajas que hemos dejado los que antes pasamos por el trance.

Intentar explicar lo que acontece dentro de ese búnker consumista daría para un blog en exclusiva, así que tendremos que posponerlo.

Un año mas la rueda se ceba en demostrarnos lo poco previsores que somo a la hora de consumir para otros, o perezosos que de todo habrá.

Un año mas y mi corazón y mi alma están acompañadas con mi chiquitín, mi juguete, el ser mas lindo que la vida me puso cerca. Un año mas un siglo mas una vida mas, siempre te quiero, te queremos y seguiremos juntos, un año mas.